Herman@ en la fe, hoy platicaremos sobre el Espíritu Santo, sabremos porque es necesario creer en él, el porque lo recitamos en el credo.
Hace algunos años se impartió una catequesis en las parroquias que duró un año, el titulo de la catequesis era El Espíritu Santo el gran Desconocido.
Ciertamente, hoy en día sigue siendo un desconocido para muchos cristian@s y aún para muchos movimientos que existen en la iglesia. También se han escrito infinidad de libros sobre el espíritu santo, han sido escritos por teólogos y uno que otro sacerdote y también laicos, pero lo han hecho precisamente sobre teorías, no teniendo la experiencia de vivir en el espíritu. Estos libros escritos también abundan en tecnicismos que complican la lectura para el pueblo de Dios. Yo no soy un teólogo, ni muchos menos un sacerdote, solo soy un laico que transmitirá en esta catequesis la experiencia vivida por medio del espíritu santo además de los conocimientos adquiridos en base a estudios realizados.
Creo firmemente en los dones del espíritu santo, como por ejemplo, la sanación por imposición de manos, el auxilio por medio de la oración y sé muy bien que el espíritu Santo se manifiesta donde menos uno se lo espera.
Si tu no crees en el espíritu, espero con esta catequesis te animes a descubrirlo, si eres un creyente, espero que esta catequesis te anime a seguir perseverando y no dejar de lado la promesa de Jesús, porque el espíritu santo se derrama en jóvenes, viejos y ancianos.
Para esta catequesis nos vamos a apoyar en la lectura del libro de Joel en su capitulo 2, versículos 28-29 donde la profecía se esta cumpliendo hoy.
Joel capitulo 2
28 Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones. 29 Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.
30 Y daré prodigios en el cielo y en la tierra, sangre, y fuego, y columnas de humo. 31 El sol se convertirá en tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día grande y espantoso de Dios. 32 Y todo aquel que invocare el nombre de Dios será salvo; porque en el monte de Sion y en Jerusalén habrá salvación, como ha dicho Dios, y entre el remanente al cual él habrá llamado.
El espíritu santo no es nuevo, este se viene manifestando desde el antiguo testamento, no con la misma intensidad de hoy, pero ya se daban manifestaciones y se le menciona únicamente tres veces con el nombre de espíritu santo, ya que el nombre más común era espíritu de Dios.
El espíritu santo el gran desconocido para muchos se menciona desde el inicio de las sagradas escrituras, cuando dice que el espíritu de Dios se movía sobre las aguas.
El espíritu santo se manifestó en varios personajes del antiguo testamento, José tenía el don de poder interpretar los sueños. Los que construyeron el tabernáculo eran hombres llenos del espíritu santo. Moisés era otro personaje que vio las manifestaciones del espíritu santo cuando se derramó sobre setenta ancianos. Josué era otro hombre que Dios lo llenó con su santo espíritu. Débora era una mujer que tenía el carisma del discernimiento. Menciono también a Elías y no dejemos por un lado a Joel.
Como puedes ver, el espíritu santo se ha manifestado todo el tiempo, aunque no con la frecuencia en que lo hace en estos últimos días. Porque Jesús lo expresó claramente, y la más grande manifestación se da en el día de pentecostés y dura hasta el día de hoy y así será hasta la venida del Señor, porque el mismo Señor dijo, estaré con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.
La profecía se está cumpliendo desde el día de pentecostés, porque el espíritu santo se ha derramado sobra toda carne, los profetas los que anuncian la buena nueva se han dado por miles tanto en varones como en hembras, los ancianos, los ungidos de la iglesia tienen sueños y los jóvenes han tenido visiones, testimonio de esto lo encuentras en los santos de la iglesia.
Hoy el espíritu santo se manifiesta en todo momento y no es exclusivo para algunos si no que es para todo aquel que crea y actúe conforme a la voluntad del Señor.
La virgen María tuvo su propia experiencia con el Espíritu Santo, porque fue este quien por su poder hizo que María quedara encinta y de allí que el fruto que tuviese sería llamado hijo de Dios.
Las manifestaciones del espíritu de Dios se pueden contar en el antiguo testamento como ya lo manifesté anteriormente dando una serie de ejemplos, esto era una señal de lo que estaba por venir. Nuestros padres vivieron bajo el amparo de Dios durante miles de años, pero Dios nunca se ha manifestado en persona, ha mandado sus ángeles como espíritus de Él, la biblia lo dice claramente y según el tiempo y la necesidad de acuerdo al plan de Dios derramó una porción de su espíritu en varios personajes. Además el espíritu de Dios se ha manifestado de diferentes formas, por ejemplo, en la zarza que ardía cuando le habló a Moisés, representa el espíritu santo como fuego, al igual que en el día de pentecostés. Se manifestó como una paloma en el bautizo de Jesús, se manifestó como un viento suave en los días del profeta Elías. También se manifestó como personas o como ángeles, en columnas de humo en fin, el espíritu de Dios se ha manifestado de diversas maneras, con esto entendemos que la humanidad nunca ha sido abandonada por Dios, al contrario, siempre ha gozado de la protección de Dios.
También se puede deducir que el plan de Dios ha sido paulatino, es decir, se ha dado por fases con la intención de enseñar al hombre paso a paso, la máxima expresión del espíritu de Dios se ha dado en Jesús y con ello se puede afirmar que Dios habitó entre los hombres, para preparar el camino de la venida del espíritu santo y que solo con el sacrificio de Jesús en la cruz se daría el derramamiento del espíritu sobre todos sin excepción tal y como lo profetizo el profeta Joel, y tu eres parte de este acontecimiento hasta que sea la venida del Señor, cumpliéndose así lo que Jesús dijo, estaré con Uds. Hasta el fin del mundo.
Al leer a los profetas hay que tener mucho cuidado sobre la interpretación de lo escrito, porque muchas cosas ya han sucedido, otras están sucediendo y otras están por suceder.
Por ello es bueno recurrir al magisterio de la Iglesia para no caer en el fundamentalismo. En el versículo 30 del texto que nos ocupa se habla de prodigios en el cielo y en la tierra, muchos esperan aún estos prodigios, pero te digo, ya sucedieron algunos que más adelante te explicaré, pero veamos las columnas de humo. Si tu recuerdas el pueblo de Israel fue guiado durante el día, en la travesía por el desierto por una columna de humo y por la noche por una columna de fuego, estos fueron fenómenos físicos que el ojo humano podía percibir. Esta profecía se cumplió, también hay que tener cuidado al leer la escritura porque muchas palabras son símbolos en el terreno espiritual. Si vemos lo de la columna de humo en el plano espiritual te digo, la profecía se esta cumpliendo y esto significa los miles de santos que han guiado a la iglesia por la travesía del desierto terrenal para llegar a la casa del Padre.
Con esto te estoy diciendo que no esperes ver columnas de humo en el cielo para entender que la profecía se cumple. Hoy tú te manejas en dos planos, el físico y el espiritual. Se requiere estar llenos del espíritu santo para poder entender los signos de los tiempos. Como y cuando se cumplirán ciertas profecías, porque muchas aun no se han cumplido, por ejemplo, el libro del apocalipsis es un libro que si no se lee con el auxilio del espíritu santo y con la ayuda del magisterio de la iglesia, te puedes equivocar, porque muchas profecías se han cumplido, otras se están cumpliendo y otras están por cumplirse, para darte una idea, los jinetes del apocalipsis, los estamos viendo desde el mismo momento en que Adán y Eva fueron desterrados del paraíso.
Joel profetiza sobre los último días, cuando dice que el sol se convertirá en tinieblas te digo, Jesús es la luz, él es el sol como figura de esta profecía, pues bien, cuando Jesús murió hubo tinieblas en el mundo, hubo oscuridad y es por ello que Joel no se equivocó al escribir. La luna como figura representa a la iglesia, la cual ha derramado su sangre por medio de los mártires, no solo los del tiempo de la persecución de la iglesia naciente sino que este fenómeno se esta dando actualmente en muchos países que aun persiguen a los cristianos, como bien dice la profecía esto sucederá antes que venga el día grande y espantoso de Dios, es decir antes de la parusía.
Toma nota, aun en los acontecimientos de la historia moderna de la salvación hay detrás una persona, invisible al ojo humano, pero perceptible a los hijos de Dios, y este personaje es el Espíritu Santo, el sol se oscureció por tres días tal y como lo dice otro pasaje de las escrituras, y la iglesia ha sido perseguida, pero el espíritu Santo ha estado presente en todo su esplendor desde el mismo día de pentecostés descrito en hechos de los apóstoles.
Hoy el sol sigue brillando por medio del poder del Espíritu Santo, la luna sigue mostrando signos de sangre, pero el espíritu santo ha dado fortaleza a todos los miembros de la iglesia para soportar los azotes del mal, lo que si es seguro y cierto, es que estamos esperando el gran día, día que será de mucha felicidad para los creyentes y espantoso para todos los que no han dejado su vida de pecado.
La profecía que está en curso por así decirlo es que todo aquel que invoque el nombre del Señor será salvo. El nombre que los creyentes invocan es precisamente el nombre del Señor Jesús, ante cuyo nombre toda rodilla se dobla. La figura de la iglesia es el monte Sion y Jerusalén, ahí es donde comienza la salvación, porque es allí donde se habla de Dios, es allí donde se enseña quien es Jesús, quien es Dios, quien es el Espíritu santo. Recuerda que son muchos los llamados, pero que son pocos los que se salvarán, recuerda que muchos a través de los siglos han escuchado la palabra y te aseguro que muy pocos podrán decir que jamás escucharon sobre Jesús, de los muchos, hay un remanente, que son los que perseveran, estos serán los elegidos.
Como puedes ver, el espíritu de Dios no ha cesado de moverse en el mundo, sus manifestaciones son muchas, actúa de diversas maneras y sopla por donde el quiere. Es una gran nube de testigos que pueden afirmar que el espíritu de Dios existe, que se manifiesta y que todos los días está con los creyentes, salvo excepciones, el espíritu santo se manifiesta a los paganos y hace de ellos siervos para Dios.
Para entender y conocer las cosas del Espíritu Santo se necesita, primero haber recibido el Espíritu Santo y segundo ser un hombre espiritual, es decir no dejarse llevar por los criterios del mundo que no son nada espirituales.
En el día de Pentecostés los apóstoles se encontraban en oración, y esta es una condición para ser un hombre o mujer espiritual, ser personas de oración constante, cuando se está en constante oración se sucede lo que dice la profecía, habrá derramamiento del espíritu santo sobre la persona orante y en esto no importa raza, no importa país, porque el espíritu santo se manifiesta por doquier.
El espíritu Santo da hoy en día más profetas, más sueños, más visiones, los niños que se involucraron en las apariciones de Fátima y Lourdes dan fe de ello. Así como ellos tú tienes también en ti la fuerza del espíritu Santo que recibiste al momento de tu bautizo y que se hizo como una marca indeleble por medio de la imposición de manos y unción con el santo oleo en el momento de tu confirmación. En ti se estaría cumpliendo la profecía siempre y cuando seas un hombre o mujer de oración.
Siempre y cuando no dejes que el espíritu de Dios que hay en ti muera, que te dejes arrastrar y llevar por los pensamientos del mundo, que confunden y atormentan, como lo es el derecho al aborto, los matrimonios entre el mismo genero sexual, la eutanasia, las falsas predicciones sobre el fin del mundo, todos los que se dejan enredar por esta clase de pensamientos abominables a los ojos de Dios, sin duda alguna tienen en si el espíritu del diablo, el que engaña, el que persuade.
Los hijos espirituales ven todos los acontecimientos de la historia a la luz de las sagradas escrituras, lo entienden a la luz del espíritu santo. Los que no cuentan con la fuerza del espíritu están en tinieblas porque viven una vida de pecado, que impide que se escuche la voz de Dios, porque cuando el pecado aparece, la comunicación con Dios se pierde, Jesús lo advirtió, el espíritu santo no se posa en cosa inmunda y la figura de ello esta en la paloma que Salió del arca de Noé, se poso en tierra firme hasta que esta estuvo libre de agua, libre de inmundicia.
El espíritu santo estará contigo siempre y cuando te mantengas en oración, asistas a tu comunidad, al templo, te alimentes o más bien dicho alimentes al espíritu que mora en ti leyendo las sagradas escrituras, porque este es el verdadero alimento del espíritu.
El ser espiritual aprende a descifrar los signos de los tiempos, porque constantemente se mantiene en dialogo con Dios y Dios le va revelando el significado de los signos de los tiempos. El ser espiritual, se deja conducir por el espíritu, no se opone, no lucha, no blasfema, simplemente está atento a escuchar la voz del Señor, porque el Señor le puede hablar a cada quien por medio de un profeta, de una visión, de un sueño, el espíritu le hablará de diversas maneras, se manifestara de las maneras menos pensadas.
El que no tiene el espíritu, blasfema, se enoja si las cosas no salen como las tiene planeadas, es necio en su accionar, es ofensivo, y otra condición para entender al espíritu es ser humilde, dejarse poner la mano de Dios.
Tú tienes que aprender a dejarte guiar por el espíritu santo, y no solo en tu vida religiosa si no que en todo, negocios, estudios, hogar, trabajo, empresa, familia, noviazgo, matrimonio, relaciones interpersonales etc. Esto con el fin de evitar fracasos de toda índole, porque el poder prometido desde lo alto se hace manifiesto hoy, porque el espíritu santo que es enviado por Dios y el Hijo, es para hacer que cada uno de nosotros sea una persona prospera en todo sentido, es por ello que en todo accionar de tu vida diaria, debes consultar en oración que pasos debes seguir, la biblia nos muestra muchos personajes que aprendieron a dejarse llevar por el espíritu y el éxito que tuvieron esta más que plasmado en la historia de la salvación.
Los que no tenían el espíritu de Dios consigo fracasaron, o que perdieron la comunicación con Dios fracasaron, ejemplos, Adán y Eva, Sansón, Saúl, Judas el Iscariote y así podríamos mencionar muchos, tu conoces a muchos que fracasan en su vida porque no tienen el espíritu santo consigo, prostitutas, borrachos, drogadictos, ladrones, asesinos, violadores, corruptos, etc.
Es por ello que no debes de cesar en pedir que el espíritu santo venga a tu vida, que realmente te cambie, porque el espíritu gime de dolor cuando se peca. Y si aun así sientes que el espíritu santo no te unge, aprende a esperar en el tiempo de Dios, no al tuyo en particular.
Porque toda empresa es difícil, y lograr los dones del espíritu santo son difíciles, requieren de mucha oración, meditación en la palabra, obras de amor, acercarte a los sacramentos de la penitencia y eucarísticos, con un corazón arrepentido y sincero, para que el espíritu santo te vaya moldeando, te vaya transformando en un hombre o mujer nueva. Deja que el espíritu Santo controle tu vida, permite que Jesús y Dios vengan a ser morada en ti, porque claro esta, mi Padre y yo vendremos a ser morada en aquellos que cumplan con la voluntad del Padre. Esto es posible gracias a la acción del espíritu santo, es por ello que en ti se puede manifestar la gracia de la Santísima Trinidad, aunque no lo creas posible.
En nuestra era la manifestación del Espíritu Santo se da precisamente con el anuncio a la Virgen María sobre el nacimiento de Jesús por intermedio de ella. Se empieza a cumplir la profecía porque el espíritu Santo se derrama sobre siervos y siervas. Al momento en que el espíritu santo desciende sobre la Virgen, ella queda llena del espíritu Santo, es la primera del cumplimiento de la profecía de Joel.
El espíritu santo habita en María, como debe de habitar en toda mujer cristiana, la cual debe de ser capaz de transmitir de llenar a otras con el espíritu santo, cuando María visitó a su prima y al saludo, Isabel quedó llena del espíritu santo, con esto te quiero decir que tu también eres capaz de transmitir estas bondades, y la biblia habla sobre ello cuando se da la imposición de manos de parte de los apóstoles, queda claro que tu puedes ser un transmisor del espíritu santo a otros.
Muchos han sido transmisores del espíritu santo y yo lo he visto en los retiros de iniciación cristiana o sanación como algunos les llaman. Yo experimenté lo que es la imposición de manos y he visto las manifestaciones del espíritu santo en dichos retiros de evangelización.
Muy aparte son las manifestaciones de charlatanes que hacen shows públicos sobre la acción del espíritu santo, unos duermen, otros saltan, otros ríen ante las cámaras de televisión y convencen a muchos que tienen el poder de hacerlo, te digo, son farsas, porque el espíritu no es mercantilista, ni muchos menos exhibicionista. Estos charlatanes lo único que hacen es ganar fama en forma temporal, llenar sus arcas con dinero de los incautos.
Los dones que el espíritu santo da, son dones que se ponen al servicio de la iglesia y los verdaderos seres espirituales no cobran por ello, ni montan shows de televisión, ni vociferan ante el publico, cierto es que vivimos en la era en que el espíritu santo se derrama sobre siervos y siervas, pero para darte una luz al respecto, te invito a que leas algunas biografías de los santos y en ellos descubrirás como estas siervas y siervos fueron llenos del espíritu santo, experimentaron el derramamiento del espíritu en sus vidas, pero te puedo asegurar que ninguno de ellos o ellas lucró con el poder que les venia de los alto. Algunos tuvieron el don de profecía, otros el don de sanación, otros el don de los milagros, otros el don de lenguas, o el don de alabanza, don de enseñanza etc.
Tú puedes tener todos los dones o algunos, pero cuidado, no lucres con lo que el Señor tu Dios te ha dado al derramar su Espíritu Santo sobre ti.
Como he dicho en anteriores ocasiones mucho se habla sobre el fin del mundo y muchos farsantes incluso toman el versículo 30 del texto que nos ocupa como parte de acontecimientos venideros, nada más falso que los que lo dicen.
Hoy vivimos bajo la era del Espíritu Santo y ciertamente hay prodigios en el cielo, pero estos prodigios se dan en la tierra, hay gozo en el cielo por cada alma que se vuelve al Señor, por cada alma que abandona la vida de pecado, que acepta al Señor Jesús como salvador, entonces en el cielo hay fiesta, hay gozo.
La iglesia aquí en la tierra se goza y hace fiesta por cada ser que vuelve al redil, por cada oveja perdida que fue encontrada. En ello se ve un prodigio, un milagro y quizás tú formas parte de ello.
La iglesia es perseguida y seguirá siéndolo, pero las puertas del infierno no prevalecerán contra ella, seguirán habiendo mártires, y seguirá tiñéndose de rojo la iglesia, pero el espíritu de Dios la seguirá guiando como si fuera una columna de humo, visible para los que están en el Espíritu, pero no para los pecadores.
Tu puedes tener tu propio pentecostés personal, tu puedes ser bautizado por el espíritu santo, ciertamente fuiste bautizado de niño o niña, pero quizás no das frutos, no rindes testimonio y es por ello que opacas el espíritu que te fue dado en tu bautizo, pues te digo, si tu tienes el espíritu santo contigo, este debe manifestarse y por así decirlo debe verse en ti, los que están a tu alrededor deben verlo en ti, porque tu eres parte de la columna de humo que guía a los demás durante el día y en las tinieblas del pecado eres parte de la columna de fuego.
Si tu estas lleno del espíritu santo, los demás lo notan, porque en ti, no hay divorcio entre fe y vida, porque bien dijo Jesús, por sus frutos los conoceréis.
Espero que tú no seas de los cristian@s que abundan en las comunidades y ministerios así como movimientos, que son lánguidos, volubles, que en la iglesia son una cosa y fuera de ella son otra. Espero que cuando tengas que decidir entre un juego y la santa misa no prefieras el juego. Espero que no te obliguen a servir, que no te empujen a ello, sino que el espíritu que hay ti, te impulse por amor a hacerlo.
Porque una cosa es decir, tengo el espíritu santo en mí, y otra cosa es que este se manifieste en tu persona. Tus acciones y una evaluación que te hagas a ti mism@ te darán la respuesta. Si el resultado es negativo, es tiempo que vuelvas a subir al lugar alto, que vuelvas a la iglesia y a la eucaristía para renovar tu pentecostés hoy.
Cuando tu vives en el pecado, te digo, el sol no sale para ti, vives en tinieblas, vives alejado de las bondades de Dios, vives esclavizad@ al odio, ira, sed de venganza, crees ser feliz pero en realidad sufres. San Pablo creía que persiguiendo a la iglesia, creía que matando a los cristianos era feliz, pero el lo dejó claramente plasmado en sus cartas, la verdadera felicidad la encontró cuando salió de las tinieblas.
Tu puedes estar alejado de la iglesia, alejado del Señor tu Dios, entonces por lógica te digo en ti la profecía se esta cumpliendo, porque el sol que es figura de Jesús se ha apagado para ti, pero no porque el lo quiera, sino porque tu así lo quieres. Cuando haces sufrir a los demás a causa de tu conducta tiñes de sangre la luna, que representa a la iglesia en este caso a sus seguidores, porque con tus acciones malas matas sentimientos y hieres a veces de muerte a muchos.
Por ello y antes de que venga el día grande y espantoso de Dios, donde los pecadores ya no tendrán salvación es necesario que te bautices en el espíritu, y este bautizo se da en el corazón, cambiando radicalmente tu manera de pensar y actuar, si haces el mal, haz el bien, si odias, perdona, si eres soberbi@ se humilde, pero todo este cambio lo da la fuerza del espíritu santo, porque aunque tu no pienses, realmente estas cansad@ de la mala vida que llevas, en pocas palabras te digo, el bautismo en el espíritu es la conversión que nace de oír y escuchar la palabra. De rechazar toda acción del demonio en tu vida, de arrepentirse de corazón de toda acción mala que has cometido y que estas cometiendo, de permitir que el Señor Jesús sea el centro de tu vida en todo momento y lugar, de renovar el sacramento de la confirmación y permitir que te sean impuestas las manos y que el sacerdote sople sobre ti, para ello es necesario que asistas a un retiro de sanación o iniciación cristiana, averigua en tu parroquia y no temas, porque el temor no es de Dios, no permitas que el malo siembre en ti la duda y que te catequice para buscar uno y mil pretextos que eviten tu retorno a la casa del Padre.
Esto te tiene que nacer de una revisión sincera de tu vida, de ponerte a pensar y buscar las respuestas a ¿de donde vienes? ¿Quién eres? ¿Hacia donde vas?, de pensar si por tus propias fuerzas eres capaz de salir de donde estas o bien necesitas ayudas de alguien superior a ti y a todo ser humano.
Si no encuentras las respuestas en tu intelecto y no encuentras ayuda en el humano es tiempo de pedir que las manos te sean impuestas, esto no es un acto mágico, ni un rito cualquiera, simplemente es la acción del espíritu santo que se manifiesta por medio de la fe. También te digo, no importa la edad que tengas, recuerda que la madre Teresa tuvo por así decirlo su segunda conversión a la edad de 40 años, no importa si eres un súper pecador@ o solo pecas en baja escala, lo que importa es que tomes la decisión de cambiar tu vida antes de que venga el día del Señor para ti, con la muerte, porque cuando mueras, de nada servirá que los tuyos clamen al Señor por tu salvación, esta salvación depende únicamente y exclusivamente de ti.
Los que hemos visto las manifestaciones del espíritu santo tanto en nuestras vidas como en las demás, nos insta a recitar el credo de los apóstoles y decir con propiedad, CREEMOS EN EL ESPIRITU SANTO.
El creer en el Espíritu Santo trae consigo una promesa, porque el Espíritu Santo hace que tu llames al padre ABBA, permite que tus labios invoquen su nombre, permite que seas dócil a la acción salvadora del Señor, y la promesa es que serás salvo, porque invocaras el nombre de Dios. La acción del espíritu santo hará que tú perseveres en la iglesia y la iglesia se salvará porque las puertas del infierno no prevalecerán contra ella y será la esposa del cordero, la Jerusalén celestial. Dios ha prometido la salvación y si tú estas en el remanente, en los pocos que quedan, te digo, tu fe y tus obras serán suficientes para que alcances la salvación.
Jesús prometió el agua en abundancia y para necesitar de esta agua, es necesario sentir sed, pues te digo, ten sed y acércate al manantial de la abundancia, este manantial es Jesús el hijo de Dios, el que prometió el paráclito, que es el que nos auxilia hoy en día.
Déjate llenar por el espíritu santo, déjate llevar por el, y te digo, no importa el camino que andes, pero si lo andas en el espíritu, tendrás fortaleza y mucha bendición.
Para ello quiero ilustrar lo que expreso con la siguiente historia, que sé que te identificaras con alguno de los personajes:
Una hija se quejaba con su padre acerca de su vida y como las cosas le resultaban tan difíciles. No sabía como hacer para seguir adelante y creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.
Su padre, un chef de cocina, la llevo a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre el fuego fuerte. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó huevos en la otra zanahorias y en la ultima colocó café. Las dejo hervir sin decir palabra. La hija esperó impaciente, preguntándose que estaría haciendo su padre. A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Saco las zanahorias y las coloco en un tazón. Saco los huevos y los colocó en otro plato. Finalmente colocó el café y lo puso en un tercer recipiente y mirando a su hija le dijo: querida, ¿que ves? Zanahorias, huevos y café. La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias.
Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Luego de sacarle la cáscara, observó el huevo duro seguidamente le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma. Humildemente la hija preguntó: ¿Qué significa esto padre? El le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad, agua hirviendo, pero habían reaccionado en forma diferente. La zanahoria llegó al agua fuerte, dura, pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer. El huevo había llegado al agua hirviendo frágil, su cáscara fina protegía su interior líquido, pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido. Los granos de café sin embargo eran únicos, después de estar en agua hirviendo, habían cambiado el agua.
¿Cual eres tu?, le pregunto a su hija. Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿Cómo respondes? Eres una zanahoria que parece fuerte pero cuando la adversidad y el calor la tocan, te vuelves débil, presa fácil para Satanás, pues pierdes tu fortaleza.
¿Eres un huevo, que comienza con un corazón blando, poseyendo un espíritu fluido, pero después de una prueba la perdida de un trabajo o de un ser querido, te vuelves duro y rígido y comienzas a cuestionar a Dios? Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargado y áspero, con un espíritu y un corazón endurecido?
¿O eres un grano de café? El café cambia el agua hirviente, el elemento que le causa dolor. Cuando el agua llega al punto de ebullición el café alcanza su mejor sabor. Si eres como el grano de café cuando las circunstancias son adversas, vas a cambiar las circunstancias como el grano de café cambia el agua, recuerda, las circunstancias no deben regir tu vida, pues tu Dios está por encima de cualquier circunstancia y para él no hay nada imposible.
A esta historia yo te pregunto a ti en lo personal ¿eres zanahoria, huevo o café?, tu sabrás pero te digo, para ser café te hace falta algo importante que quizás aun no has pedido, y eso es el Espíritu Santo, que hará de ti un café, capaz de cambiar tu vida, tu entorno mientras esperas la venida del Señor.
El catecismo dice: Dios creó al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó, hombre y mujer los creó. El hombre ocupa un lugar único en la creación, está hecho a imagen de Dios; en su propia naturaleza une el mundo espiritual y el mundo material; es creado hombre y mujer; Dios lo estableció en la amistad con Él. No. 355
Pon atención a lo que dice el catecismo en donde dice que el hombre ocupa un lugar único en la creación y que es hecho a imagen y semejanza de Dios, por lo tanto el hombre tiene el espíritu de Dios y es ahí donde estriba la imagen y semejanza con Dios. El pecado impide el desarrollo espiritual del hombre y por lo tanto impide amistad con Dios, es por ello que el hombre mismo no debe de cesar en pedir el Espíritu de Dios, y Dios lo renueva por medio de la imposición de manos de sus hijos, porque el espíritu santo es transmisible, así lo hizo Jesús cuando sopló sobre los suyos, así lo hicieron los apóstoles cuando imponían manos y así es hoy.
Herman@, esta catequesis debe de ayudarte a encontrarte nuevamente con el Señor, debe de ayudarte a seguir perseverando, porque el Espíritu de Dios esta aquí en la tierra, está alrededor tuyo y quiere manifestarse en tu vida, porque quiere que Dios y Jesús sean uno solo en tu persona, somos hij@s celestiales que por causa del pecado hemos perdido el derecho a vivir con Dios, pero el hijo amado, abrió las puertas para volver a tener el derecho de amistad con Dios, de ser hij@s de Dios, para muchos quizás el sacrificio de Jesús en la cruz es inútil, pero para los que creemos, no lo es, porque gracias a ello, cuando se llegue el día grande y terrible de Dios, los creyentes se gozarán en el Señor.
He tratado en la medida de lo posible explicar y a la vez dejar el sentido de lo que es el espíritu santo y como este puede actuar en tu vida siempre y cuando tú lo dejes actuar en ti. El rey Salomón, pidió unción del espíritu santo, pidió don del espíritu santo, lo que pidió fue SABIDURIA, y esta le fue concedida. Jesús mismo expuso en una ocasión diciendo, ¿que padre le da una serpiente a su hijo cuando este le pide pan? Y el mismo aclara, cuanto más les dará el Padre si le piden. Siendo así te insto a que pidas el espíritu santo, a que lo clames porque la promesa también es para ti.
Tu tienes que actuar, ponerte en movimiento como se dice, para ello a la luz de la palabra te digo NO APAGUEN EL ESPIRITU 1tesalonicenses 5,19. Mantén viva la llama de su amor.
Oremos.
Luis Mayorga
- próxima catequesis: Creo en la iglesia que es una.
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